textos argumentativos

¿Qué son los textos argumentativos?

En la redacción de todo tipo de texto existe una finalidad intrínseca que refleja la necesidad de transmitir un mensaje desde el emisor al receptor. Cierto es que en función del tipo de texto en sí la metodología varía de forma drástica, de ahí la importancia de conocer el tipo de texto a redactar para garantizar que el lector recibe mediante cada párrafo lo que estaba demandando.

No obstante hay una característica común en la mayoría de ellos, y es que como redactor o persona que escribe un texto siempre se puede leer entre líneas la visión más personal del emisor, pero este factor se ve potenciado cuando se trata de un texto argumentativo donde el objetivo principal es reflejar de forma clara y sencilla la opinión respecto a un tema.

¿Qué es un texto argumentativo?

La argumentación en sí hace referencia a la exposición de un conjunto de razones con el propósito o la intención de demostrar o justificar un asunto o tema. Por lo tanto, un texto argumentativo no suele ir solo, porque la argumentación no va sola sino que por norma general suele ir acompañada con una parte expositiva.

Como su propio nombre indica, un texto argumentativo se caracteriza por ser aquel cuya función principal es expresar opiniones, ideas o diferentes posturas sobre un tema en particular con el que queremos llegar de manera directa y clara al receptor que leerá el texto en sí.

Por consiguiente, la finalidad no es otra que la de persuadir mediante el don de la palabra y la comunicación al espectador. Son muchas las vías para alcanzar el propósito, pero sin lugar a dudas los métodos por excelencia son el texto inductivo, deductivo o abductivo como recursos clave de un texto argumentativo.

Principales usos del texto argumentativo

Entre el amplio abanico de opciones en las que un texto argumentativo puede solventar cualquier tipo de situación, es cierto que estos textos son ampliamente utilizados en el ámbito periodístico, científico, judicial, filosófico y publicitario. De forma adicional, merece mencionar que en el texto argumentativo se suele combinar características del texto expositivo, para poder presentar temas de interés general de la manera objetiva.

Asimismo, hay que destacar que los textos argumentativos también pueden ser un recurso muy manido en conversaciones, exposiciones y debates, porque a través de ellos se convence a otras personas sobre nuestro punto de vista o sobre la veracidad o falsedad de un asunto.

estructura texto argumentativo

Estructura de un texto argumentativo

Todo texto argumentativo está formado por tres partes imprescindibles y vitales para su correcto desarrollo.

En primer lugar una tesis inicial, donde se formula de manera clara y sencilla la idea principal que se quiere defender mediante la redacción del texto. Es el paso más importante porque el lector con los primeros párrafos podrá entender el objetivo que pretende alcanzar el propio escritor. Por ello es de vital importancia que la tesis esté formulada de manera correcta, porque es el núcleo en torno al cual gira la argumentación del resto del texto.

En segundo lugar tenemos un desarrollo argumental. Esta parte básicamente consiste en exponer de forma desarrollada y al detalle la justificación del punto de vista del escritor y se puede y debe basar en citas textuales o argumentos con peso que ejemplifiquen y hagan entender al lector el porqué de ese pensamiento.

Y por último, como en todo tipo de texto tenemos la síntesis o conclusión final que ejerce la función de moraleja del texto para recordar en breves palabras al receptor cual era el mensaje principal que el emisor pretendía transmitir a lo largo de la sucesión de palabras. Por supuesto, si por algo se caracteriza el texto argumentativo es por la coherencia y cohesión que encadena cada uno de sus párrafos, porque en todos ellos se mantiene clara la visión objetivo y realista del escritor.

Sin embargo, este esquema puede variar dependiendo de la forma de escribir de cada autor y de la forma de transmitir el pensamiento o idea, eso sí, la argumentación y justificación del porqué de una idea siempre debe primar en todo tipo de texto argumentativo, pese a tener partes de expositivo.

¿Por qué los textos argumentativos?

Escribir en sí es una de las tareas más complicadas y sencillas de realizar, porque a través de un puñado de letras ordenadas se pueden despertar los sentimientos o sensaciones más escondidas en uno mismo al primer golpe de vista. Una tarea sencilla de recibir porque el lector siempre busca entender la mente del autor y complicada de ofrecer porque nunca se sabe hasta qué punto debe parar la argumentación objetiva y añadir la mezcla exacta de ficción.

Por ello, para que tu texto argumentativo adquiera la calidad narrativa que merece es necesario establecer de manera clara la finalidad comunicativa del texto y los argumentos que marcarán el desarrollo del mismo, solo así el receptor entenderá el motivo del mensaje.